MONSEÑOR NOUEL.-Con profundo dolor, la comunidad de Bonao despide a Kendry Rivas de Jesús, un adolescente de 14 años que falleció este martes tras permanecer ingresado por 32 días luchando por su vida, luego de resultar gravemente afectado por un incendio que destruyó su hogar en el Barrio Marino López de la provincia Monseñor Nouel.
Kendry era el último miembro de su familia que permanecía hospitalizado, tras el trágico siniestro ocurrido el pasado 9 de agosto, que también cobró la vida de su madre, su padre y su hermanito de 9 años. Con su muerte, el incendio deja un saldo de cuatro víctimas fatales, dejando a vecinos y familiares sumidos en un inmenso dolor y consternación.
El incendio devastó la residencia de la familia, y la tragedia ha estremecido a la comunidad, que ahora acompaña en el luto y la impotencia a quienes sobrevivieron y recuerdan a la familia perdida.
SOBRE LA TRAGEDIA
La tragedia que comenzó la madrugada del viernes 9 de agosto en el sector Obra de Dios, Marino López, del distrito Juma, cobró la vida de un padre y su hijo menor, quienes quedaron atrapados en las llamas que redujeron a cenizas su vivienda familiar. Según informaciones preliminares, el incendio se habría originado por un cortocircuito, lo que provocó la rápida propagación del fuego, sin dar oportunidad de escape a las víctimas.
Posteriormente, el hermanito de 9 años de la familia falleció días después debido a la gravedad de sus quemaduras. Luego, la madre de los menores también perdió la vida tras no poder superar las lesiones sufridas en el siniestro.
Finalmente, Kendry Rivas de Jesús, de 14 años, quien permanecía ingresado en estado crítico, falleció este martes, 32 días después del incendio, convirtiéndose en la cuarta víctima de la tragedia familiar. Kendry era el último integrante que luchaba por sobrevivir tras el devastador siniestro que destruyó completamente la vivienda de la familia.
Vecinos y comunitarios relataron con pesar que intentaron socorrer a la familia, pero la intensidad del incendio impidió rescatarlos a tiempo. Bomberos del Cuerpo de Bonao se presentaron de inmediato al lugar, pero debido a la velocidad de las llamas no pudieron salvar a los ocupantes atrapados.
Las autoridades locales investigan las causas del siniestro y han hecho un llamado a la comunidad a extremar las precauciones con instalaciones eléctricas y otros riesgos potenciales de incendios. Expertos sugieren revisar periódicamente los sistemas eléctricos y colocar detectores de humo como medida preventiva.
Por su parte, la Alcaldía de Bonao expresó su solidaridad con los sobrevivientes y anunció apoyo inmediato, incluyendo asistencia médica, alimentos y alojamiento temporal. La comunidad del sector Obra de Dios ha organizado vigilias y recogidas de ayuda para brindar apoyo a los sobrevivientes, mientras líderes comunitarios exigen que se agilicen las investigaciones y se refuercen las medidas de prevención para evitar futuros incidentes similares.
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