Santo Domingo.- Antonio y Maribel Espaillat salieron de la cárcel del Palacio de Justicia de Ciudad Nueva, este viernes, luego de pagar la garantía económica impuesta por la magistrada Fátima Veloz, como parte de la medida de coerción por la tragedia del Jet Set. Además del pago, los imputados deben realizar presentación periódica y no pueden salir de país.
Ambos son acusados de homicidio involutario por el colapso del techo en el centro nocturno que acabó con la vida de más 200 personas y decenas de heridos, mientras se presentaba el mereguero Rubby Peréz, quien falleció aplatado por el desplome.
La jueza de la Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente del Distrito Nacional, Fátima Veloz, impuso este miércoles medidas de coerción no privativas de libertad a los hermanos Antonio y Maribel Espaillat, imputados por el desplome del techo del centro nocturno Jet Set Club, ocurrido el pasado 8 de abril y que dejó un saldo de 236 personas muertas y más de 180 heridas.
Pese a la magnitud de la tragedia, la magistrada consideró que no procedía imponer la prisión preventiva solicitada por el Ministerio Público, al amparo del principio de legalidad penal, establecido en la Constitución dominicana y en la Convención Americana sobre Derechos Humanos.
En su decisión, sustentada en el artículo 319 del Código Penal y en el artículo 226 del Código Procesal Penal, la jueza valoró que los imputados tienen domicilio fijo, actividad empresarial estable, arraigo social y familiar, y han colaborado con el proceso desde el inicio, lo cual descarta, a su juicio, cualquier riesgo de fuga.
La calificación jurídica provisional del hecho es homicidio involuntario, delito que, conforme al Código Penal dominicano, contempla una pena máxima de dos años de prisión correccional, lo que limitó las posibilidades de imponer prisión preventiva.
Ante este escenario, la jueza Veloz dictó en su lugar las siguientes medidas: garantía económica de RD$50 millones, presentación periódica e impedimento de salida del país. Asimismo, declaró el proceso como caso complejo dada su magnitud.
En cuanto a la imputación adicional contra Maribel Espaillat, quien fue señalada por supuesta coacción a un testigo, el tribunal concluyó que las pruebas aportadas muestran una conversación ambigua, que no alcanza el umbral requerido para afectar el curso de la investigación.