Santo Domingo, RD- El Ministerio Público buscará este miércoles que se haga justicia por las 236 víctimas mortales y los 130 niños que quedaron huérfanos tras el colapso del techo de la discoteca Jet Set la madrugada del pasado 8 de abril.
El procurador adjunto Wilson Camacho, titular de la Dirección General de Persecución del Ministerio Público, enfatizó hoy que, desde el inicio de esta tragedia, la procuradora general de la República, Yeni Berenice Reynoso, dispuso todas las medidas necesarias para garantizar una investigación exhaustiva y evitar la impunidad.
Berenice Reynoso, dispuso todo lo necesario para que realicemos un trabajo serio que asegurara que no haya impunidad en estos hechos que han generado un duelo colectivo en República Dominicana», declaró Camacho a los periodistas en el Palacio de Justicia de Ciudad Nueva.
Camacho reiteró que la muerte de 236 personas, que ha dejado a decenas de niños en la orfandad y ha sumido en el dolor a familiares y amigos, es resultado directo del comportamiento «negligente, irresponsable y con una muestra absoluta de desprecio a la vida humana» por parte de Antonio y Maribel Espaillat.
El Ministerio Público ha sustentado su solicitud de medida de coerción con más de 130 medios de pruebas, que respaldan cada una de las afirmaciones del órgano acusador. «Esperamos, en consecuencia, que el tribunal acoja la solicitud presentada consistente en prisión preventiva para Antonio Espaillat y prisión domiciliaria para Maribel Espaillat», añadió Camacho.
La intimidación de testigos ha sido un hecho corroborado en el proceso, según Camacho, lo que robustece la postura del Ministerio Público y permite al tribunal verificar el peligro procesal de los imputados.
El procurador adjunto explicó que el arraigo de los imputados no debe ser un obstáculo en este caso, dada la magnitud de la tragedia: «Este caso dejó 236 fallecidos, más de 180 heridos y más de 130 niños huérfanos, niños que tenían antes del 8 de abril su vida asegurada y que ahora tienen un futuro incierto porque dos personas decidieron poner sus intereses económicos y personales por encima de la vida humana».
El colapso del techo de la discoteca, propiedad de Antonio Espaillat, fue un accidente ocurrido el martes 8 de abril de 2025 en Santo Domingo. En el momento del colapso, se llevaba a cabo un concierto de merengue del artista Rubby Pérez, quien falleció a causa del siniestro.
Antecedente
El edificio comenzó a funcionar como un cine desde el 6 de abril de 1973, se convirtió en el club nocturno Jet Set en 1994 y se renovó en 2010 y 2015. Con techos de dos pisos de altura sobre una amplia pista de baile abierta con capacidad para 1000 personas de pie y 700 sentadas, el edificio estaba equipado con grandes acondicionadores de aire y generadores eléctricos en la azotea, y una gran iluminación de escenario y altavoces en el techo.
En 2023, se incendió después de que un rayo cayera sobre un generador en el techo, pero los bomberos lo consideraron estructuralmente seguro. Los ingenieros civiles y arquitectos han indicado que el techo no estaba adecuadamente sostenido por columnas estrechas a los lados y ninguna en el centro, y podría haberse derrumbado por su propio peso debido al hormigón debilitado por el fuego y la maquinaria pesada que transportaba.
La discoteca Jet Set ofrecía música bailable en vivo los lunes por la noche, lo que atraía a gente conocida.
