SANTO DOMINGO, RD – El reconocido comunicador Johnny Vásquez arremetió contra la Organización de Estados Americanos (OEA) y la comunidad internacional por su inacción frente a la crisis haitiana. Vásquez no escatimó en calificativos, tildando a los organismos de «charlatanes», «sinvergüenzas» y «bebe vinos», y exigió una intervención contundente y un plan real para Haití.
Con su habitual vehemencia, Vásquez instó a la OEA a «dar la cara» ante la situación que vive el vecino país, catalogándola de un «disparate» y acusando al organismo de ser «insignificante» y de haber patrocinado «golpes de Estado en la época del 60», siempre al servicio del «gran capital».
«Son un grupo de bebe vinos que van a indicar a los países y aprovechan elecciones para ir de que a supervisar», afirmó el comunicador, sugiriendo que la OEA y otros organismos internacionales son percibidos como una «CIA internacional» que «no sirven para nada».
Vásquez respaldó las declaraciones del senador estadounidense Marco Rubio, a quien calificó como un «aliado natural» de la República Dominicana. Según Vásquez, Rubio ha sido una voz solitaria alertando sobre el peligro de la migración haitiana en un momento en que «nadie hablaba de Haití».
El comunicador advirtió que la migración descontrolada podría «llevarse el Estado dominicano» y «chupar» los recursos nacionales hasta el punto de no poder «hacer una letrina en este país».
Enfatizó además que, el problema haitiano «no es un problema humano» en el sentido de que la prioridad debe ser la República Dominicana. «Si yo te doy el moro a ti, los hijos míos van a quedar sin nada y los hijos míos son prioridad», sentenció.
Vásquez reconoció la postura del presidente Luis Abinader, quien ha mantenido el tema de Haití en la agenda internacional. Sin embargo, criticó la lentitud de la ONU para aprobar resoluciones que se traduzcan en acciones concretas y fondos.
Para Vásquez, la solución pasa por una intervención militar en Haití, la creación de un gobierno provisional real, un ejército y una policía, así como la construcción de infraestructura básica como hospitales y la reconstrucción del Palacio Nacional. Sugirió una división de tareas entre las potencias: «Estados Unidos ustedes van a organizar el ejército. Rusia ustedes van a organizar la policía. Francia ustedes van a construir los hospitales».
Finalmente, el comunicador propuso medidas drásticas para frenar la migración ilegal, incluyendo la incineración de vehículos que transporten migrantes indocumentados. «Cuando quemen cinco o seis vehículos, ustedes verán», sentenció Vásquez, frustrado por años de «hablar» sin ver resultados.
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